Wednesday, April 25, 2007

Máximas

Máximas, axiomas de la verdad total y absoluta indiscutibles (ni Jesús se opone).
He aquí una recopilación de un par, que acontece en nuestros días, nuestra sociedad y nuestras vidas y por qué no, nuestras muertes también.

"La diferencia entre estar ebrio y estar sobrio es que en el primer caso uno reconoce que ha dicho boludeces."

"La inteligencia de uno es inversamente proporcional a lo que habla."

"A nosotros los seres civilizados nos falta una cosa, ser civilizados."

"1+1=2 (teoría) 1+1=3 (práctica)"
"1+1=2(actitud hombre) 1+1= ay no sé. Creo que 4, no mejor 5, espera mejor 3. Me parece que 9, o quizá 7 (actitud mujer: lo que es seguro es que NUNCA va a ser 2)" *

"Si las mujeres pensaran y sintieran como los hombres, entonces habría embarazadas por todos lados pero a su vez, habría mucha mayor capacidad intelectual." **

"Lo obvio, por obvio, es olvidado."

"Por lo general cuando uno pierde algo, es, básicamente, porque no sabe dónde lo dejó."

"La palabra (dícese vulgarmente chamuyo), aquella con la cual Sócrates cautivó y disgustó a toda Atenas (y siguió haciéndolo hasta nuestros días), no fue creada para abrir las mentes de los jóvenes sino para abrir las piernas de las jóvenes."

"Es menester de un aburrido, divulgar vagas ideas y hacerlas pasar como máximas para que luego, otros las lean y crean esto." ***

*Machismo justificado.
**Machismo (para mí) justificado pero tolero la discrepancia en dicho estatuto y/o definición.
*** No es este el caso. (mmm...)

Saturday, April 21, 2007

Clamor

Atrapado entre cuerdas de seda
que encierran al más fuerte,
condenado a una ley nunca impuesta,
preso en la propia esencia,
librado a esta suerte.

Los albores de la desdicha
atienden un llamado
que nunca nadie hizo
y se autoinvitan a un festín
donde traen sus presentes
al primer postor de vivencia
y en sucia condena marcan
la peripecia del anfitrión.

En total desazón la fiesta
y la desgracia han empezado
como presa desposeída de luchadores
para caer en avaricia de hienas.

Y uno sólo mira como las gotas
en segundos pasan y como
esas gotas enrojecen y espesan
en el hedor de la propia carne
impía y efímera, valiosa sólo
para un club social de tumbas.

Sin contar más, estando en plena
putrefacción, sosegado por el evento
lleno de gotas ensangrentadas
y harto de un juicio sin códigos,
sin leyes y de pura habla.

Sin poder soltarse de la seda,
sin poder destruir al cuerpo
o destruirlo todo.
Enturbiado por la presencia
de negros vestigios de la existencia
y con deseos macabros, ajenos a uno.

Sólo la esencia, permanece pura.
Pura pero presa, en un mundo
donde justos mueren en la infamia
y corruptos bailan al compás de la vida
con la providencia negra y nebulosa.

Impotencia y extremismos;
paradójicos compañeros.
Cuando no van de la mano,
sólo queda una liberación.
Todo se reduce a un fuerte
y poderoso clamor,
provocador de terremotos,
caos y tempestad.

La esencia, al menos ella,
quedará libre del cuerpo
consumado, convertido
en cadáver viviente
esperando el retorno
de su ánima. Que volverá
cuando esté perdida en el espacio
y tenga que volver a su hogar.

Y así la historia se repite,
hasta que se produzca
la salida,
de otro clamor.